Con el paso de los años, me replanteo algunas cuestiones relacionadas con la Educación. Ya estoy inmerso en la primera evaluación, realizando los primeros exámenes, mis primeros trabajos cooperativos y aprendiendo a evaluar de otra manera.
Empiezo a entender que se puede poner una calificación con algo más que pruebas escritas. Avanzo poco a poco, porque me cuesta salir de mi zona de confort, de la costumbre, de lo que he hecho siempre, y me siento como si estuviese en plena escalada al Everest.
Imagen vía @Aulas_Creativas
Me ayuda reconocer lo que significa la palabra EDUCAR y he llegado a una conclusión importante: es
cierto, EDUCAR es
más que un verbo. Educar es INSPIRAR, CUIDAR, COMPARTIR, ACOMPAÑAR, CRECER... todo lo que aparece en la imagen y, probablemente mucho más.
Por eso es tan importante el trabajo que se realiza desde las tutorías o, aunque no seas tutor, hablando a los alumnos de nuestros propios sentimientos. Fomentar
valores en el aula es otra de nuestras tareas más importantes y de mayor
responsabilidad.
En esta época de grandes avances tecnológicos, en plena era
digital, no debemos cansarnos de procurar que nuestros chicos recuperen emociones, criterios firmes, que sepan decir no y, desde luego, que descubran en la familia
el pilar fundamental de su formación y de su desarrollo.
¿Se
imaginarán ellos cuál puede ser la mejor red social?
"Cuenta
la leyenda que un artista quiso pintar la cosa más bella. Abandonó su casa en
busca de motivos, escenas, vivencias admirables. Le preguntó a una novia sobre
el valor más hermoso y hablaron sobre el amor. Se dirigió a un soldado, que
venía de la guerra y conversaron sobre la paz. Se encontró con una religiosa y
comentaron sobre su fe. Pero no halló exactamente lo que buscaba. Con una pizca
de desilusión regresó a su casa, donde fue acogido cariñosamente. Al joven
artista se le abrieron los ojos. En su familia encontró el ideal, la
inspiración, el escenario que buscaba".
Imagen vía @aulaPlaneta
Creo en una nueva escuela, moderna, actualizada,
innovadora, de calidad, creativa... y mi trabajo con alumnos y familias procura avanzar siempre en esa dirección. Aunque para conseguirlo:
es cierto, NO
DEBEMOS DEJAR NUNCA DE APRENDER...
Imagen vía @netlearning20
Reconozco mi PASIÓN por educar porque trabajo para algo que me encanta. Afortunadamente, no soy el único. Somos ya muchos los que creemos en otro modelo de escuela más dinámico, más cercano, más eficiente.
Imagen vía @aulaPlaneta
Me quedo con este DECÁLOGO DEL MAESTRO
para afrontar con optimismo las próximas semanas de curso. El trabajo puede tardar meses, incluso años, en dar frutos pero los profesores somos artistas y, antes o después, las OBRAS DE ARTE saldrán a la luz.
No hay tiempo
para más... ¡LOS JÓVENES NOS NECESITAN!